Page 45 - Tendencias 2022

A R T Í C U L O S DE
O P I N I Ó N

En ese contexto de mayor incertidumbre y la tímida ejecución del
Plan Nacional en respuesta a las consecuencias de la guerra de
Ucrania, el gobierno debe renovar y revisar las medidas tomadas
en el RDL 6/2022, de 29 de marzo, actuando, preferentemente en,
por lo menos, cuatro frentes: convocar la mesa de Diálogo, revisar
y fortalecer los mecanismos distributivos, revisar y fortalecer las
medidas favorables al mantenimiento de la actividad económica y
del empleo, introducir mecanismos más eficaces de control de
precios de la energía y combustibles:

Sin un Plan Nacional de medidas urgentes más audaz en lo social
y en lo laboral, las tensiones sociales y laborales van a incrementar
en nuestro país. Los trabajadores se sienten frustrados después de
las penurias pasadas durante la crisis COVID y, ahora, sienten que
otra vez tienen que cargar con todo el coste de la inflación asumien-
do pérdidas de renta y restricciones en su capacidad de consumo.

Si alguna lección nos puede dejar esta situación actual de crisis es
que son las políticas económicas más sociales y progresistas las
que son más eficaces de cara a afrontar una crisis económica. Lo
hemos visto desde el inicio de la pandemia con el despliegue del
“escudo social” y ahora lo vemos con las medidas anticrisis, que
aunque no son suficientes, van en la buena dirección para frenar
una caída en seco de las personas trabajadoras y más vulnerables
de nuestra sociedad.

Si queremos seguir avanzando y consolidar el futuro de nuestro
país, estas políticas no sólo deben mantenerse, sino que también
deben ampliarse. El contexto tan volátil al que nos enfrentamos
tanto a nivel social, como político, pero, sobre todo, económico
(nuevas corrientes del virus, la escalada de precios energéticos, la
crisis de suministros a nivel mundial o la continuada tensión bélica
en Ucrania) nos obliga a que debamos esforzarnos más para paliar
los efectos a corto, medio y, sobre todo, a largo plazo frente a una
recuperación que, si bien avanza de forma paulatina, aunque con
mucho vigor en la creación de empleo; vemos como tendremos un
período de estancamiento o ralentización. No podemos permitir que
sean los de siempre quienes paguen los platos rotos de políticas
que por falta de ambición, no se despliegan de forma ambiciosa. La
situación exige una intervención más directa y rápida en las activi-
dades que están generando las tensiones inflacionistas, y una ex-
tensión de las medidas protectoras de las rentas de las clases
medias y de las personas más desfavorecidas. Sólo frenando la
espiral de aumentos que se está dando en algunas empresas y
sectores para elevar sus márgenes de beneficio se logrará reducir
el nivel general de precios. •

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