Page 45 - Tendencias 2023

A R T Í C U L O S DE
O P I N I Ó N

lo largo de nuestra vida adulta”. Algo que transformó al Homo Sa- pero “podemos entender el universo y eso nos convierte en algo
piens en una especie exploradora. Es cierto que en otras especies especial”.
de animales se han observado comportamientos similares de ejem-
plares que, saliéndose de la norma, emprendieron caminos diferen- Querer explicarse el mundo en el que vivimos e incluso el sentido
tes a los de sus congéneres aunque ello les supusiera afrontar de su propia existencia, es una constante en la historia de la huma-
peligros o retos que comprometiesen su seguridad, su confort y su nidad. Pero primero fuimos monos de los bosques. Luego pasamos
vida. Biólogos y zoólogos han demostrado que todos los mamíferos a ser monos de tierra: desde hace unos 3,3 millones de años evo-
tienen un fuerte impulso exploratorio. Pero la especie de monos de lucionamos para caminar erguidos. Ese milagro supuso, por poner
la que formamos parte, sintió ese impulso irrefrenable desde sus un ejemplo, que el pie de un ser humano contenga 26 huesos, 20
inicios que nos haría querer llegar más lejos y adentrarnos en lo músculos, 33 articulaciones y 114 ligamentos. Nos convertimos en
desconocido. Todos los jóvenes monos son curiosos, pero en el eficaces cazadores recolectores, que cada día ampliaban su terri-
Homo Sapiens la curiosidad infantil, ligada al juego y la imaginación torio, lo exploraban y lo aprovechaban antes de proseguir su cami-
no solamente no se apaga sino que se fortalece con el paso de los no. La inmediata consecuencia de caminar sobre las piernas fue
años. La esencia de los seres humanos es la capacidad que posee- que pudiésemos liberar las manos para fabricar herramientas y
mos de hacernos preguntas, aunque a veces no encontremos res- poder utilizarlas con eficacia, entre otras cosas, para poder cazar
puestas. Y cada respuesta, a su vez, nos lleva a nuevas preguntas, en grupo presas más grandes y poder alimentar a las primeras
y a seguir investigando. Aunque todo lo desconocido sea, por defi- cuadrillas humanas, generalmente pequeñas y aisladas. En ese
nición, enigmático y peligroso, hay un impulso genético que nos proceso evolutivo, además, nuestro cerebro creció hasta multiplicar
hace seguir adelante. Aquel “mono desnudo”, (como nos calificó el por tres su volumen.
prestigioso zoólogo británico Desmond Morris) evolucionó de mono
de los bosques a cazador recolector y se mantendría nómada du- Hace unos 60.000 años aproximadamente aquellos ancestros nues-
rante decenas de miles de años, siempre en constante movimiento, tros salieron de África y se lanzaron a explorar y conquistar el
hasta la invención de la agricultura. Aunque la prudencia y el miedo resto del planeta. Hace unos 21.000 años cruzaron el estrecho de
acotan esa propensión desde la infancia, afortunadamente siempre Bering y comenzaron a colonizar el continente americano y hace
hay suficientes individuos de la especie que conservan ese impulso unos 7.000 años alcanzaron por fin el extremo sur en Tierra de
curioso que nos ha permitido progresar hasta límites impensables Fuego. Pero hace unos doce mil años, llegaría la domesticación de
e imposibles. Me temo que, sin saberlo ni proponérmelo conscien- animales y plantas, y poco después la invención de la agricultura,
temente, he sido uno de ellos. y con ella los comienzos del sedentarismo. Pasamos de utilizar el
territorio y nuestro entorno a poseerlo en exclusividad. Y se cons-
Ser curioso significa estar vivo, y aunque no haya tanta gente truyeron ciudades, fue el inicio de nuestra civilización. Pero nunca,
viva como creemos, pues en palabras de Stephen Hawking: ape- en ninguna etapa histórica, se dejó de explorar. Apenas ha pasado
nas “somos una raza de monos avanzada, en un planeta menor” medio millón de años (un soplo de vida en la historia de nuestro
planeta) desde que aprendimos a encender una fogata hasta las
pinturas de Altamira. Y solo unos diez mil años desde que abando-
namos las cavernas, al final de la última glaciación, y la construc-
La esencia de los seres ción de vehículos espaciales.

humanos es la capacidad que Y nunca dejamos de caminar… hasta hace apenas unos años.
poseemos de hacernos Sin duda la revolución industrial, trajo consigo grandes aportaciones

preguntas tecnológicas que supusieron importantes avances; pero también
grandes desastres sociales y una destrucción y contaminación del
medioambiente, como nunca antes se habían conocido. El ritmo de

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