Page 187 - Tendencias 2020
P. 187

A  r  t  í  c  u  l  o  s  de
                                                                      o  p  i  n  i  ó  n




                                                                           En medio de todo esto sobrevino una pandemia.

                                                                           Componer canciones para cambiar el mundo puede resultar algo
                                                                           vanidoso. Escribimos versos para sentirnos menos solos. Y en los
                                                                           momentos de adversidad sentirse acompañado es tremendamente
                                                                           útil. Nos ayuda a entender que tenemos capacidad de influencia en
                                                                           nuestro futuro en tanto en cuanto hay semejantes con los que
                                                                           compartimos frustraciones y deseos.

                                                                           En esta pandemia muchos músicos salieron con sus guitarras a los
                                                                           balcones. Otros desde nuestras casas abrimos una ventana al
                                                                           mundo para regalar nuestro trabajo a quienes quisieran escuchar.
                                                                           Se trataba de generar espacios de encuentro, de mitigar esa sen-
                                                                           sación de pérdida de control. Le cantábamos a esa vida congelada
                                                                           que algún día recuperaríamos, poniendo en el horizonte la posibili-
                                                                           dad de fin a la pesadilla del encierro. Buscábamos en las canciones
                                                                           vestigios de esa normalidad arrebatada y nos aferrábamos a ellas
                                                                           como náufragos a una tabla a la espera de divisar pronto la costa.

                                                                           ¿Saldremos mejores de esta crisis? La pandemia ha mostrado las
                                                                           costuras del sistema, ha puesto en evidencia sus contradicciones, ha
                                                                           agravado la precariedad en la que vivimos y eso hace que la mayor
                                                                           parte de la ciudadanía se plantee la necesidad de cambiar el modelo
                                                                           económico y de sociedad en el que vivimos. Ante esta realidad se
                                                                           producirá una reacción y un sector minoritario pero muy poderoso de
                                                                           la sociedad tratará de frustrar todo cambio, resistiéndose a perder los
                                                                           privilegios sobre los que se sustenta el sistema. La polarización es
                                                                           fruto  de dicha reacción: aquellos a los que nunca se les ha dicho que
                                                                           no a nada defenderán con uñas y dientes sus posición privilegiada.

                                                                           Así que es probable que los buenos salgan mejores y los malos
                                                                           peores. Quién sabe.

                                                                           En el transcurso quizá los músicos hayan perdido el pudor a la hora
                                                                           de escribir versos que hablen de todos nosotros, del proyecto co-
                                                                           mún, de la injusticia social, del cumplimiento pendiente de los de-
                                                                           rechos negados. Quizá pase de moda la caricatura del triste can-
                                                                           tautor que siempre protesta. Quizá en estos tiempos en los que
                                                                           aflora el miedo, la música sirva para establecer vínculos que fomen-
                                                                           ten la empatía.

                                                                           La vida sin música es un etcétera y cuando la rutina confinada rodea
                                                                           nuestros pies con una cadena de etcéteras vacíos, cuando la vida
                                                                           queda suspendida en aire como los animales disecados del Museo
                                                                           de Ciencias Naturales, las canciones otorgan movimiento a los re-
                                                                           lojes que cuentan las horas que quedan para el encuentro, abren
                                                                           ventanas a la esperanza, nos ayudan a levantar la mirada.

                                                                           Perdonen la cursilería. Quiero pensar que el encierro me ha hecho
                                                                           mejor pero me temo que hay cosas que no cambian.  •




                                                                             Componer canciones para

                                                                             cambiar el mundo puede

                                                                             resultar algo vanidoso.
                                                                             Escribimos versos para

                                                                             sentirnos menos solos






                                                                       185
   182   183   184   185   186   187   188   189   190   191   192