Page 52 - Tendencias 2020
P. 52
T E N D E N C I A S
2 0 2 0
Las empresas que no pongan
en su centro la sostenibilidad
no tendrán futuro. Y hablo de
una sostenibilidad integrada
que combine las cuestiones
climáticas, inclusivas, de
igualdad, de equidad, veracidad
y transparencia
gravísimas y a los que luego se les busca una explicación que los
convierte en previsibles- podemos decir que lo importante es, siem-
pre, lo que viene después, lo que hacemos después. Es un debate
interesante, qué duda cabe, pero lo podemos resolver con una ex-
presión castiza y que todos entendemos bien: «A toro pasado…».
Lo que sí es relevante es no caer en una trampa de la lógica que
insinúa que no es momento de apostar por estas cuestiones
medioambientales cuando las necesidades importantes están en
otro lado. No es cierto. La sostenibilidad integrada, que combina
cuestiones climáticas, inclusivas, de igualdad, de equidad, veraci-
dad y transparencia no puede ser aplazada para «un momento
mejor». Y para los que gustamos de metáforas económicas que
recurren a la fauna: la sostenibilidad ya nunca más será el elefante
en medio de la habitación que todos evitan mencionar por esquivar
las consecuencias. Todo lo contrario, lo que ahora se impone es
acelerar estos procesos porque van de la mano: economía y
medioambiente son un binomio indivisible. No estamos obligados
a elegir. Es más, no habrá desarrollo económico si este no es sos-
tenible. Las empresas que no pongan en su centro la sostenibilidad
no tendrán futuro. Y hablo de una sostenibilidad integrada que
combine las cuestiones climáticas, inclusivas, de igualdad, de equi-
dad, veracidad y transparencia.
Desde Endesa, ahora que parece que este cisne, al menos, ha ido
alejándose, nos toca insistir más que nunca en dos ideas clave:
debemos continuar las inversiones en transición energética para
favorecer tanto la progresiva descarbonización y el fomento de las
energías renovables como la eficiencia energética. Además, no
podemos dejar de incentivar la digitalización que, como hemos
visto en esta crisis, ha sido un factor esencial para no detener las
actividades fundamentales de todo un país. Y cuanta mayor digita-
lización, mayor éxito en esa tarea de todos.
El Ejecutivo, cómo no, tiene un papel vital. Además de comprome-
ter, como hizo, un enorme volumen de recursos para amortiguar los
efectos sanitarios de la crisis, resultó evidente que era crítico y
esencial incentivar la movilización de más recursos procedentes del
sector privado y promover medidas para el crecimiento sostenible.
Por eso debemos tener muy en cuenta, en nuestras decisiones como
país, la conveniencia de nuestras políticas fiscales: ponderar que
no subir impuestos -por su efecto negativo en ese tejido empresa-
rial que nos sostiene- y la apuesta por no revertir las reformas
estructurales acometidas durante la anterior crisis y que funciona-
ron son fórmulas que sabemos que nos van a situar en una posición
más fuerte para lo que ahora debemos hacer entre todos.
50

