Nacido en la localidad madrileña de Chinchón en 1937, tuvo una infancia difícil propia de la posguerra española. Cuando estaba cumpliendo el servicio militar en Melilla, decidió dedicarse a la interpretación, dejando su trabajo de mecánico tornero, para seguir su vocación teatral. Comienza en el Teatro Infanta Isabel de Madrid. Actuó como aficionado hasta 1960, año en que debuta como profesional. Su acceso al mundo cinematográfico se da en la década de los sesenta con papeles secundarios que poco a poco irán adquiriendo importancia hasta formar parte del grupo de actores más taquilleros del cine español de los setenta junto a Alfredo Landa y José Luis López Vázquez. Su debut en el cine se produjo con La familia y uno más en 1965 y luego vendrían las comedias atrevidas de la época pero también trabajos dramáticos como La colmena, de Mario Camus o El pájaro de la felicidad, de Pilar Miró. Estrechamente vinculado al teatro y entre sus últimos trabajos destacan los musicales El hombre de La Mancha y My Fair Lady. Entre sus reconocimientos destacan la Concha de Plata en el Festival de Cine de San Sebastián de 1978 por Un hombre llamado Flor de Otoño y en 1982 consigue el primero de sus cuatro Fotogramas de Plata por su trabajo en la película La colmena. En 2012 obtiene su primer, y único, Premio Goya por su papel en la película de Javier Rebollo, El muerto y ser feliz, por la que también recibe su segunda Concha de Plata en San Sebastián.
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